Antología más que islas, segunda entrega

En esta segunda entrega, intentaré cubrir el resto del libro, haciendo comentarios sobre las autoras, los textos y si es posible alguna información extra que les permita comprender a las autoras y/o sus textos.

Varios de los cuentos giran alrededor de la temática del maltrato hacia la mujer, abuso de poder de figuras masculinas y un maltrato que desemboca en femicidio. Los cuentos en sí no usan el mismo tipo de narrativa, pueden ser de ciencia ficción, oníricos o costumbristas. Estilo ciencia ficción serían Eva nunca duerme de María del Carmen Pérez Cuadra de Nicaragua, Ella de Alexandra Pagán Vélez de Puerto Rico. Considero al cuento Cacán y la ignomia, costumbrista, de Aurora Arias de República Dominicana y Elena y Elena de Karla Suárez de Cuba, más bien onírico porque a pesar de que informa la situación real de un país, está tejido a base de pensamientos, recuerdos, escenas que no sabemos a veces con certeza si son reales o percepciones y se utiliza el recurso de la escritura del diario personal. No puedo olvidar el cuento La noche muda de Kianny Antigua de República Dominicana, el cual narra un historia de maltrato que toma un giro inesperado. Así vistas las cosas, una tercera parte de los cuentos se inspiran en esta temática.

Quimbaba, Servicio autónomo y Tour exhiben una cualidad que a mi me parece identifica la producción del Caribe, rápidez, cinestesia, humor aún en lo más nefasto, como si describieras la vida mientras corres a toda prisa, como el migrante africano de Servicio autónomo. También usan un lenguaje coloquial sumamente entretenido, al estilo mudanza criolla creativa, al estilo sanki pankis.Las autoras de estos textos son Yolanda Arroyo (Puerto Rico), Lillian Pallares (Barranquilla, definitivamente) y Rita Indiana (República Dominicana). Mayra Santos-Febres (Puerto Rico), hace gala de una narrativa sólida y un estilo consolidado con El exilio de los asesinos , texto que comparte con los anteriores aquello de los cinestésico en las descripciones. Santos-Febres es una académica y escritora ampliamente reconocida y pueden conocer más de ella en este link.

http://www.elem.mx/autor/datos/106030

Denise Phé -Funchal de Guatemala, me aparece se aparta del resto con un texto tierno y fantasmagórico, mágico casi: Sala de estar .

No hablaré mucho de mi texto, El viaje, el cual cierra el libro. Solo diré que es histórico y cuenta un incidente real, la toma de la ciudad de Panamá por un pirata inglés pero narrado desde las voces de mujeres esclavizadas.

Quedan representadas en la antología Puerto Rico, República Dominicana, Guatemala, Nicaragua, Panamá, Venezuela, Colombia, Cuba. No hay autoras de Costa Rica ni de Honduras. Sería interesante que la editora nos narrara un poco ese proceso de búsqueda de autoras porque muchas veces nos es tan fácil como pueda parecerles. Otra vez les animo a leer la antología.

Lectura de Más que islas, Antología de cuentistas del Gran Caribe Hispano. Parte I

Antología Más que Islas llegó a Panamá

Este año recibí finalmente en mis manos el libro Más que islas, Antología de cuentistas del Gran Caribe Hispano. Como muchas antologías su historia comienza hace unos años atrás, para ser más específica en 2018. En marzo de ese año me llegó un correo electrónico de Magdalena López, escritora e investigadora de la Universidad de Lisboa, invitándome a participar de dicha antología. Magdalena es Doctora en Literatura Latinoamericana por la Universidad de Pittsburgh, especializándose en las culturas y literaturas del Caribe Hispano. Como otros proyectos en lo que he participado, hay una serie de pasos, enviar varios cuentos para que puedan escoger el más adecuado a gusto de la antologadora. El antologador es quien tiene la visión completa de la paleta narrativa que desea ofrecer al lector. Escogieron uno de mis pocos cuentos históricos, El viaje, el cual ya ha sido traducido al inglés por Christina Vega-Westhoff . También está siendo traducido al portugués y pronto podré compartir dicha traducción. Luego hubo que firmar un contrato con editora La Moderna, autorizándoles a publicar el cuento. Aquí debo aclarar que en la mayoría de las antologías literarias no se les paga a los escritores. Algunas personas creen que porque una tiene un cuento en una antología o escribió un libro recibe dinero por eso. Nada más alejado de la realidad. En el 2020, participé de un live organizado por la Asociación Cultural Yo soy el Otro, donde finalmente pude ver los rostros de algunas de las escritoras con las que compartía el libro. Lastimosamente no pude estar mucho tiempo pues ese mismo día tenía otro live. Solo recuerdo estar rodeada de muchas mujeres muy habladoras, a las que su pantalla de zoom intentaba contener. Por algún motivo el libro físico no lograba su viaje hasta mi persona. Pero al parecer Magdalena estuvo en Panamá por razones personales y le dejó el libro a un músico que me conocía y este finalmente me lo dió. Así que la lectura se ha hecho mucho más fácil desde que tengo el libro, anteriormente leía de un PDF.

Inicio mis comentarios con los dos primeros cuentos del libro, definitivamente muy buena selección porque son un total K.O. El primer cuento es ”Animal Realengo” de la venezolana Carolina Lozada. No solo la coprotagonista de esta narración es una vagina con manías suicidas a quien su dueña llama como a un gato, “misu, misu“ cuando se le esconde sino que la misma textura de la narrativa es totalmente cinestésica, atrevida (y díficil de considerar algo atrevido en tiempos posmodernos), descomplicada, como una niña que te saca la lengua y se ríe a carcajadas .

Encontré en Internet esta conversación entre Carolina Lozada y Magdalena López, donde se detalla más de la obra de Carolina, sus temáticas, cómo se enlazan esas temáticas a la situación de Venezuela y a la realidad que la va oprimiendo exponencialmente. Se nota el conocimiento que tiene Magdalena de las otras narradoras de la región pues va subrayando paralelismos entre la escritura de Carolina y otras escritoras caribeñas, desconocidas para Carolina. Aquí les dejo el enlace por si desean leer la entrevista completa.

El siguiente cuento es ”En vísperas del Accidente” de Ena Lucía Portela, la cual continúa con un lenguaje narrativa con muchos puntos en común con Lozada: in your face, el cuerpo sexual con entidad propia, sin disculpas ni resquemores, con un toque sádico de una protagonista cuyo nombre nunca se revela, pero si todos sus pensamientos y lo que ven sus ojos caribeños en una Amsterdam donde el sexo y las drogas se venden y consumen libremente. En 1999, Ena ganó el premio Juan Rulfo de cuento otorgado por Radio Francia Internacional (este premio tuvo su última edición en 2012) y actualmente es representada por la agencia literaria Carmen Balcells. En verdad leyendo por un momento me dije, coño, Melanie, ¿cómo quedamos metidas en el mismo libro con estas panteras?

El cuento que realmente me gustó a nivel personal fue el que menos me esperaba, Agua dura. Porque esos estudiantes cubanos también fueron mis compañeros de secundaria y universidad. Quitando lo del régimen de Fidel, toda la atmósfera me es perfectamente conocida. Que si los apodos a los profesores, la copia, las estrategias para que no se copien, los temas traídos por los pelos para los exámenes, la negativa a realizar ciertas tareas y la presión del grupo hacia los más estudiosos para que no las hagan…yo he estado ahí, yo fui esa estudiante estudiosa que lidió con la rabia del grupo por entregar esa tarea, también he escuchado la arenga y discursos de quienes defienden al grupo, pero fuera de esa vida escolar tan bien narrada, esta ese otro relato, lo que le sucede al profesor de Química. Y ahí me parece hasta un relato para explicar cómo se construye un cuento, porque un cuento son dos narraciones, dos narraciones que forman una urdimbre que se va tensando hasta el final, final donde se revela que hubo siempre dos texturas, no una y eso conlleva a la sorpresa, el shock, el alivio, la náusea, el horror, según sea el cuento.

La autora de Agua Dura es Mylene Fernández Pintado. Mylene es cubana, abogada y narradora. Uno de sus libros de narrativa más reconocidos es Anhedonia (1999).

Y hasta aquí mis apuntes sobre la antología. Continuaré poco a poco hasta completar mis impresiones de cada uno de los cuentos y sus autoras